Todos deberíamos comer más frutas y verduras, pero preparar esas comidas representa bastante tiempo lavando, cortando y pelando. ¿Cómo podemos encontrar el tiempo para preparar esos productos frescos como parte de snacks y comidas caseras rápidas?
Preparar frutas y verduras listas para comer o añadir a una receta no tiene por qué ser complicado. Aquí tiene algunas sencillas ideas:
- Asegúrese de que sus cuchillos están afilados. Es difícil cortar productos frescos con un cuchillo no afilado, incluso un tomate con piel fina. Además, emplear un cuchillo no afilado puede ser peligroso porque se le puede escurrir y cortarle.
- Designe a un ayudante de chef para que le ayude a cortar esos productos. Los niños de edad preescolar pueden ayudarle a cortar las hojas de verduras como lechugas, espinacas y coles rizadas. Incluso los niños pequeños pueden usar un cuchillo de sierra de plástico para cortar productos más blandos. Llévelo al nivel siguiente e invite a su joven chef a preparar este Batido de bananas y bayas.
- La piel de las frutas y las verduras tiene montones de vitaminas y minerales nutritivos. Algunos productos frescos tienen la piel fina y pueden ser rallados en lugar de pelados, entre ellos las zanahorias, las patatas, las manzanas, los calabacines, las calabazas amarillas, los pepinos y las remolachas. Lavar bien estos productos permite comer la capa externa y ahorra tiempo de preparación.
- Muchas frutas, como la sandía y el cantalupe, son grandes y difíciles de cortar. Comience cortándolas por la mitad, y entonces corte cada mitad por la mitad, y después repita la misma operación hasta disponer de pedazos manejables. Coma la fruta directamente de la capa exterior firme, llamada corteza, o utilice una cuchara para romper trozos del tamaño de un bocado.
- ¡Convierta las verduras en fideos! Compre un espiralizador, es decir, una herramienta que convierte verduras y frutas en tiras largas o “fideos”. En unos pocos minutos, usted puede convertir calabacines, calabazas amarillas, calabazas bellota, remolachas, batatas o cualquier otro producto sólido en tiras largas o “fideos”. Usted puede encontrar esta herramienta en el supermercado o una tienda de objetos para la casa. Pruebe a preparar esta colorida, deliciosa y fácil receta para una Ensalada de arcoíris en que se usan zanahorias, calabacines y calabazas amarillas.
- Compre frutas y verduras listas para comer. Las naranjas, las manzanas y las bananas están disponibles todo el año en las tiendas de alimentos. Se pueden conservar en un cuenco en el mostrador y sirven como un snack fácil, o podemos lavarlas y ponerlas en la lonchera de nuestros niños. Las uvas, los arándanos, las cerezas, los tomates pequeños y los pimientos de tamaño snack son también fáciles de lavar y comer.
- Compre productos enlatados o congelados cuando estén de oferta y téngalos a mano en su despensa y congelador. Esto le ahorrará estrés porque ya tendrá la mitad de sus platos llenos con frutas y verduras que ya tenía preparadas para consumir. Usted puede encontrar recetas fáciles como Chili de 3 latas, a partir de ingredientes enlatados, para preparar una rápida cena.
Ahora que ya tiene bastantes frutas y verduras a mano y muchas sugerencias para prepararlas, ¿cómo consigue que su familia consuma más frutas y verduras?
