¡Cocinar con hierbas y especias es muy divertido! Usted puede fácilmente añadir excitantes sabores a sus comidas y bebidas sin un extra de azúcar, grasa o sal. 

La mayoría de gente piensa que hierbas y especias son la misma cosa, ¡pero no es así!

Las hierbas son la parte verde, fragante y comestible de una planta pequeña (albahaca, menta, romero, cebollino, orégano, eneldo, salvia).

Las especias proceden de la corteza, la raíz, las yemas, las bayas o las semillas de plantas o árboles (canela, jengibre, cebolla, ajo, clavo, pimentón).

Usted puede cultivar hierbas en casa, las puede comprar frescas en su mercado campesino local o también las puede encontrar frescas o secas en su supermercado.

Cómo almacenar hierbas y especias secas:

Guarde las hierbas y especias secas en recipientes de cristal herméticos en un lugar fresco, oscuro y seco, como un armario o un cajón. Sólo el pimentón, el chile en polvo y la pimienta roja deben guardarse en el frigorífico para que conserven su color rojo. NO guarde otras hierbas y especias en el frigorífico. Si se conservan adecuadamente, las hierbas y especias molidas deberían mantenerse frescas durante un año y las especias enteras deberían poder utilizarse durante dos años. Etiquete el recipiente con la fecha de compra utilizando un rotulador permanente.

Cómo almacenar hierbas frescas:

Las hierbas frescas deben conservarse en el frigorífico menos la albahaca. Enjuague bien las hojas bajo el grifo, sacúdalas para eliminar la humedad y séquelas bien dando golpecitos con un paño limpio o una toalla de papel. Una vez secas, páselas al frigorífico. Deberían durar entre 4 y 7 días.

Hierbas de hoja delicada como el cilantro, el perejil y la menta: Corte la parte inferior del tallo, retire las hojas dañadas o marrones y póngalas en un tarro con unos dos centímetros de agua en el fondo. Cubra el tarro con una tapa o envoltorio de plástico. Cambie el agua a diario.

Hierbas de hoja delicada como el cilantro, el perejil y la menta: Corte la parte inferior del tallo, retire las hojas dañadas o marrones y póngalas en un tarro con unos dos centímetros de agua en el fondo. Cubra el tarro con una tapa o envoltorio de plástico. Cambie el agua a diario.

Albahaca: Corte la parte inferior del tallo, retire las hojas dañadas o marrones y póngala en un tarro con unos dos centímetros de agua en el fondo. Deje el tarro destapado en la encimera y manténgalo alejado de la luz solar directa. Cambie el agua a diario.

Hierbas de hoja firme como el romero, el tomillo y la salvia: Envuélvalas sin apretar en una toalla de papel húmeda. Guárdelas en una bolsa de plástico con cierre en el cajón de las verduras del frigorífico o en un recipiente hermético. 

Las hierbas frescas y las secas no se utilizan en la misma cantidad en una receta. Aquí tiene una guía que le ayudará a utilizar la cantidad adecuada en su receta:

  • HIERBAS FRESCAS – 1 cucharada cortada finamente
  • HIERBAS SECAS – 1 cucharadita desmenuzada
  • HIERBAS SECAS MOLIDAS – ¼ a ½ cucharadita (comience primero con poca cantidad y pruebe la receta)

¡Pruébelo!

Usted puede experimentar con una o más de estas combinaciones: 

  • Añada menta fresca y limón a un vaso de agua con hielo.
  • Omita la sal al cocinar pasta y condimente con albahaca, orégano, perejil y pimienta o utilice una mezcla de condimentos italianos.
  • Para obtener más sabor, añada especias a los platos crudos, como las ensaladas, varias horas antes de servirlos.
  • Introduzca a los niños a las hierbas y las especias con algunas fáciles combinaciones de sabores como manzanas con canela, bananas con nuez moscada y pollo con romero.

¿Cómo puede usted añadir estos maravillosos sabores a sus platos con verdura? 

Pruebe a añadir estas hierbas y especias:

  • Zanahorias: canela, clavo, eneldo, jengibre, mejorana, nuez moscada, romero, salvia.
  • Maíz: comino, curry en polvo, cebolla, pimentón, perejil.
  • Frijoles verdes: eneldo, curry en polvo, mejorana, orégano, estragón, tomillo.
  • Verduras: cebolla, pimienta.
  • Patatas: eneldo, ajo, cebolla, pimentón, perejil, salvia. 
  • Calabazas de verano: clavo, curry en polvo, mejorana, nuez moscada, romero, salvia.
  • Calabazas de invierno: canela, jengibre, nuez moscada, cebolla.
  • Tomates: albahaca, laurel, eneldo, mejorana, cebolla, orégano, perejil, pimienta.
     

Prepare alguna de estas fáciles recetas:

 

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Este material se desarrolló con fondos proporcionados por el Supplemental Nutrition Assistance Program (SNAP en inglés) del Departamento de Agricultura de los EE.UU. (USDA siglas en inglés) en cooperación con el Departamento de Servicios Humanos de Maryland y la Extensión de la Universidad de Maryland. Los programas, actividades e instalaciones de la universidad están disponibles para todos sin distinción de raza, color, sexo, identidad o expresión de género, orientación sexual, estado civil, edad, origen nacional, afiliación política, discapacidad física o mental, religión, estado de veterano protegido, información genética, apariencia personal o cualquier otra clase legalmente protegida.